
El sobresalto es casi diario. Cercano o lejano. Se mata por odio, por ideología, por miedo o por un impulso incomprensible a segar vidas ajenas. Las formas son múltiples. Desde una inmolación con bombas en la cintura hasta un camión que pisotea y destruye vidas en una tranquila avenida de Niza. Los muertos lejanos nos…