El presidente Bartomeu dijo tras el buen partido del Barça en La Cerámica que “el VAR parece ser que siempre favorece a un equipo”. Es una opinión que escandalizó a los tertulianos nocturnos del domingo que llevan semanas machacando al Barça sobre un replanteamiento de la situación de Messi en el equipo, no confirmada por el jugador ni por el club, y por futuros escándalos no comprobados.
Con los datos en la mano, Bartomeu tiene razón aunque no llegó a mencionar al Madrid. El Barça vive sujeto a una crítica implacable a pesar de los excelentes resultados y títulos conseguidos en los últimos años. En este sentido es un club democrático que no rehúye la controversia entre sus dos almas internas, más irreconciliables a medida que se acercan elecciones, y el adversario eterno que no concibe que pueda existir otro club que le dispute la hegemonía.
Una cosa es la opinión de Bartomeu sobre la aplicación del VAR y otra muy distinta es la llamada de Florentino Pérez a Luis Rubiales, presidente de la RFEF, 20 minutos después de que el VAR no interviniera para señalar un penalti a Vinicius en un partido contra la Real Sociedad. Opinar no cambia nada. Llamar, sí que lo puede hacer a juzgar por las palabras de Javier Tebas, presidente de La Liga, que ayer censuró de nuevo la llamada de Florentino a Rubiales diciendo que “no es bueno para el mundo arbitral”. En el mes de enero había declarado que hay un antes y un después de aquella llamada. El VAR es un avance ineludible. Pero depende de quién lo administra, de quién llama, a quién favorece de forma sistemática y no equitativa.
Publicado en Mundo Deportivo el 7 de julio de 2020
Sr.Foix: el VAR ha conseguido que volvamos a preguntarnos lo de siempre…quién controla al que controla el VAR…
1. El VAR es inacceptable en el dialeg o relacio entre Espanya i Catalunya. Sempre es decanta a favor d’Espanya
2. El VAR es l’establishment espanyol: el mon de Juan Carlos, el TC, el TS, l’aparell policial, la caverna mediatica, el Govern central…
Bufffffffffffff.
Sempre resulta profitós mantenir el circ de qualsevol manera.
Tres consideracions:
1. És molt sospitós que totes les decisions del VAR «post-Covid» hagin afavorit al Reial Madrid: per càlcul de probabilitats, sembla que alguna li hauria d’haver anat en contra.
2. És totalment inadmisible que el President d’un Club telefoni al Presidente de la Lliga per a queixar-se: si té alguna reclamació, l’ha de fer per les vies reglamentàries. I encara és més inadmisible que el President de la Lliga se l’escolti.
3. Però, si el Barça hagués guanyat a Sevilla i a Vigo, com li calia fer si volia assegurar-se la Lliga, ara no estaríem parlant del VAR…