
Pep Guardiola ganó la batalla emocional y cultural en el Allianz Arena de Múnich. No hay nada que seduzca tanto a un humano que oir su propia lengua de labios de un extranjero. Fue una exhibición de sus capacidades idiomáticas. Se lo reconocieron los tres alemanes que estaban presidiendo la multitudinaria rueda de prensa –Rummenigge,…