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Alemania, razones y simplificaciones

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Angela Merkel

Angela Merkel

Hay que impedir que los prejuicios cultural y sociales vuelvan sobre Europa. Es habitual que los ingleses miren a los franceses con unas pulgadas de complejo de superioridad. Los franceses miran por encima del hombro a los italianos, los italianos a los españoles y los españoles a los portugueses. Dice el periodista Gideon Rachman que todos temen y ridiculizan a los alemanes.

Es peligroso entrar en la lucha de culturas, de idiomas o de poder entre los europeos. Estas pugnas suelen acabar mal si se llevan hasta las últimas consecuencias. Se empieza siempre por el lenguaje, por la palabra escrita o hablada, por las imágenes, por las recriminaciones de la historia. Alemania es poderosa y puede lanzar mensajes a favor o en contra de adversarios difusos. Es alarmante. Pero también es peligroso cargar sobre las espaldas de Alemania todas las desgracias europeas. Cuidado con las simplificaciones.

Contaba Kapuscinski en una entrevista a Bru Rovira en La Vanguardia que la Segunda Guerra Mundial no empezó con el ataque a Polonia. Empezó con el lenguaje. Lo mismo ocurrió en los Balcanes. De pronto aparecen palabras como luchar, liquidar, enemigo,matar, aplastar. Es el lenguaje de la agresión y la arrogancia. Lo vemos en los medios y lo vemos en los discursos políticos, en las discusiones públicas y privadas. Y así se prepara el ambiente, se caldea la atmósfera para cuando empiecen los enfrentamientos.

Hay que poner especial esmero en el cuidado de las palabras, en el lenguaje, en los conceptos nuevos que den un sentido difuso a la realidad. La convivencia se rompe por los intereses. Pero antes de los intereses se han utilizado las palabras que son las que transmiten sentimientos que pueden enfrentar a sociedades y pueblos.

  19 comentarios por “Alemania, razones y simplificaciones”

  1. Siempre me tiro como un loco a las clasificaciones de Forbes por si por un descuido resulta que soy multi y no me he enterado. No hay novedad, sigo sin aparecer.

    Para hacer boca hoy me he leido la relacion de los cincuenta mejores restaurantes del mundo mundial que ha aparecido hoy, encabezada por el restaurante de los Roca en Girona. Debo confesarles que no he estado en ninguno de los cincuenta, ni como comensal, ni como pinche, ni como aparcacoches.

    Hay veinticho restaurantes de doce estados de Europa en los que he estado, pero ni por asomo he celebrado mantel en ninguno de sus restaurantes laureados.

    Estoy acongojado y no veo yo que en el inmediato futuro este para reservar en estos templos de la gastronomia, salvo que me nombren consejero delegado del Santander (que hace la tira que me dice que quiere ser mi banco) me dimitan y cobre 88 millones de euros por el disgusto.

    Como lo ven?

  2. El Sr. Foix recomienda cuidado en la utilización de las palabras que nunca está de más. Personalmente me ofende y provoca más los hechos que rompen y acaban con unos derechos sociales largamente luchados. En cuanto al lenguaje vivo en un mundo donde la monarquía habla de justicia e igualdad, la iglesia habla de sexualidad y los que más tienen hablan de austeridad. Todo muy desquiciado no?

  3. Hay frivolidad en el uso de las palabras, de los adjetivos. Es cierto. Hay unos topicos y unos estereotipos que se utilizan ya no tan solo frivolamentem, tambien de forma recurrente Es cierto pero es leve cuando nos referimos a los italianos o a los alemanes etc o cuando ellos se refieren a nosotros. Afortunadamente estamos pelin mas viajados y leidos y aunque recurramos a latiguillos ciertamente pasados de moda, hay topìcos que por su simplismo ya no se los cree ni quien los utiliza.

    Otra cuestion seria intramuros del estado español en donde quiza si que el lenguaje arrojadizo de unos contra otros y viceversa puede hacer entrever una violencia que puede pasar en un nonada de la semantica al tortazo.
    Los medios, los foros, los blogs, la calle, el ambiente en general ya contienen expresiones inquietantes que pueden producir violencia fisica real inmediata, ya que en este caso el tema esta pegadito a nosotros. El tema no esta en improbables enfrentamientos entre estados o naciones, el tema esta en la violencia de proximidad.

    • En España la violencia verbal es constante, todo son gritos,insultos y soluciones populistas en los medios, pero la calle es diferente yo veo una gran diferencia entre la crispación mediatica y el día a día en la calle con la gente.

      http://www.youtube.com/watch?v=hd01npYiMxE

      • Creo que tienes tu parte de razon Francis, aun asi, el dia a dia en la calle con la gente, siguiendo tu frase, lo veo cada vez con un individualismo mas cerrado en los propios problemas, con las calles y los transportes publicos atestados de ciudadanos con cara de poker y cada vez mas huyendo de la realidad inmediata a traves de mil y un artefactos electronicos y digitales que a un buen oyente le ponen al caso de conversaciones de un banal que tumban o directamente a problemas en el trabajo o economicos.
        Una dualidad esquizoide como cuando nos pasan por television un reportaje sobre las ejecuciones hipotecarias y sin solucion de continuidad y sin aviso de golpe nos meten la publicidad de un automovil sensacional y despues los de fairy por ejemplo nos hablan de como cunde una gotita de su magico detergente entre sonrisas y vitores de la nena y la abuelita.
        Esta calma chicha en la calle, es la calma del despiste, del desconcierto, de una mala milk existente pero sin cauce para la expresion.

        • Totalmente de acuerdo , dogbert. Copio un extracto del artículo: «Por qué no se produce un estallido social» de Ignacio Sanchez-Cuenca:
          ….»A pesar de todas estas calamidades que he enumerado, la gente no se levanta. ¿Qué es lo que pasa?

          Por un lado, ha dejado de haber alternativas. ¿Cuál podría ser el modelo que sustituyera al actual? ¿El capitalismo autoritario chino? No hay hoy una ideología que proponga un camino distinto al que estamos transitando y que sirva para organizar una resistencia efectiva. La gente está dominada por la rabia, que se traduce en rechazo y alienación con respecto al sistema económico y político, pero la rabia no cristaliza en un movimiento que suponga una amenaza colectiva.

          Por otro lado, a pesar del empobrecimiento generalizado, España sigue teniendo un nivel de desarrollo considerable. Sabemos que las democracias desarrolladas son extraordinariamente estables. Aguantan casi todo. Hay una regularidad asombrosa: no ha habido nunca una democracia con una renta per capita superior a la de Argentina en 1976 que haya colapsado. España tiene una renta per capita muy superior a esa, incluso después de la crisis de estos años. Por eso, cabe esperar que haya tensiones y episodios violentos, pero no un estallido generalizado. En parte, porque el Estado es muy poderoso y puede poner freno a la protesta; en parte también porque hay muchas familias propietarias de pisos, o que tienen sus ahorros en bolsa, que no están dispuestas a arriesgar en aventuras de resultado incierto. El desarrollo trae consigo un mayor nivel de conservadurismo político a todos los niveles.

          El síntoma más claro de que la gente, por muy cabreada que esté, no quiere riesgos, es la ausencia de un debate público en España sobre la conveniencia de permanecer en el euro. A pesar de que la unión monetaria ha resultado ser una ratonera, casi nadie quiere asumir los costes a corto plazo de salirse del euro. No deja de ser curioso que la gente dirija sus quejas a los partidos y a las instituciones españolas, cuando buena parte del problema reside más arriba, en las reglas de funcionamiento del euro y en las políticas que marcan los países del norte. Es verdad que ha caído mucho también la valoración popular de las instituciones europeas, pero sin demasiadas consecuencias: el apoyo al euro sigue siendo masivo. Este apoyo es definitivo para entender por qué no se produce un estallido.

          En fin, seguiremos aguantando con resignación una situación que, se mire como se mire, resulta intolerable. «

          • una explicación interesante para entender la actual situación social. el texto, desde un punto de vista desapasionado, creo que toca elementos de reflexión que no andan desencaminados.

      • En este país eso de que la fuerza se nos va por la boca tiene bastante de cierto. En los medios y en los paisanos.
        En todo caso Francis, lo que yo veo en la calle es una (como mínimo) protesta diaria en forma de mani, concentración, escrache o lo que sea, un discurso absolutamente pesimista, un quejarse a diestro y siniestro y todo ello compaginado con el habitual de ir al trabajo (el que aún lo conserve) , y los otros hábitos personales en un intento de preservar nuestra forma de vida.

        • No digo que la gente no este preocupada y se no queje, vamos el que no este preocupado es directamente imbecil, pero no veo que el teatro mediatico crispado sea el reflejo de la preocupación de la gente, me parece más una forma de vivir del tema acentuando posiciones artificiosamente encontradas a nivel derecha izquierda o nacionalismo catalan nacionalismo español.

  4. Sr.Foix: tenemos un problema de fondo, la unión monetaria europea se hizo mal y deprisa, a conveniencia de unos intereses determinados, para unos fines determinados y como vemos, con unos vencedores determinados…ya se habla de una unión europea de dos velocidades…dentro de nada veremos que hay tres o cuatro velocidades…lo que equivale a decir que habrá ciudadanos de primera, segunda o tercera en Europa, algo que ya es más que evidente hoy en día…para ese viaje no nos hacian falta tantas alforjas…haber luchado para dar la mejor educación y preparación a nuestros hijos, para verlos ahora emigrar en la misma dirección que lo hicieron nuestros padres, abuelos o nosotros mismos, eso es algo que clama al cielo y demuestra el vergonzoso fracaso de determinadas políticas y conponendas económicas, sociales y financieras en Europa…Unión Europea Sí…Manipulación Europea No…

    • Cierto BartoloméC el proyecto europeo globalista es un absoluto fracaso. Paises con moneda propia y banca pública que no están en la UE son soberanos. Me temo que ni siquiera estaremos en laEuropa de las tres o cuatro velocidades porque nosotros vamos a pedales.

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