La gran batalla que viene

La guerra de Putin en Ucrania ha aislado a Rusia y ha abierto la pugna entre China y Occidente. (Foto Getty Images)

La ausencia de Vladímir Putin en la cumbre del G-20 en Indonesia indica la soledad de Rusia en el tablero geoestratégico global y la consolidación de Xi Jinping como representante de una China que disputa la hegemonía comercial, científica y política a Estados Unidos, Europa y todo Occidente.

El presidente Xi mantuvo tres horas de conversación con Joe Biden estableciendo el marco de relaciones bilaterales, que serán tensas y con líneas rojas como la pertenencia de Taiwán a China y la defensa de Estados Unidos de la independencia de la isla que fue una aliada principal de Washington en el Pacífico hasta que Nixon viajó a China en febrero de 1972 a instancias del estratega y maniobrero Henry Kissinger.

Las cartas entre Estados Unidos y China están echadas y la partida será larga e incierta con Taiwán como trofeo o bastión de resistencia, según cada una de las dos partes. El presidente Xi ha hecho un despliegue de diplomacia suave en la cumbre de Bali. Se ha reunido, además, con Macron, con Pedro Sánchez y otros líderes europeos. Hace unos días el canciller Scholz visitó oficialmente Pekín. China, al contrario de Rusia, no quiere propiciar revoluciones ni someter a otros países a la obediencia de Pekín. Le basta con invertir, colonizar comercialmente, exportar su tecnología y ser un agente de progreso imprescindible en África, América Latina y también en los países desarrollados de Occidente que dependen de China activa y pasivamente.

La penetración incuestionable de Estados Unidos en la cultura occidental en el siglo pasado la pretende ejercitar de otra manera China en este siglo. Con una diferencia muy notable: los norteamericanos viven en la libertad de una democracia imperfecta y los chinos están controlados por más de 90 millones de miembros del Partido Comunista que vigilan la vida y las actividades de sus conciudadanos.

Acabe como acabe la guerra en Ucrania, no entra en el marco de prioridades chino que continúe el conflicto en forma de una guerra antigua, torpe, imperial y con el uso de la fuerza bruta. Putin no solo vive aislado en el Kremlin sino que no tiene detrás un país próspero y moderno. La pérdida de la ciudad de Jersón y los avances de las tropas ucranianas en el Donbass evidencian la poca consistencia del ejército ruso, que no contaba con el fervor patriótico de los ucranianos al hacer frente a una invasión injustificada y no provocada.

Estados Unidos y Europa seguirán dando apoyo a Zelenski en su lucha contra la agresión rusa. Pero, a la vez, intentarán por vías diplomáticas detener la guerra que pone en peligro el abastecimiento alimentario del planeta, aumenta el coste de la vida y desestabiliza la política en las naciones democráticas.

Las guerras que ha ganado Rusia siempre han sido en alianza con otros países, que, posteriormente, cada uno ha seguido su propio rumbo y sus intereses. Putin está solo y si Zelenski sigue reconquistando territorios, esta soledad puede llevarle a actuar desesperadamente y cometer el último error que podría comportar un golpe palaciego en el Kremlin.

La Rusia eterna perdurará y condicionará la política mundial aunque con menor intensidad que en los dos últimos siglos. El centro de gravedad se ha desplazado más hacia Oriente, donde China intenta dominar Asia y ser un actor global imprescindible. La pugna entre las democracias liberales de Occidente y los sistemas autoritarios de China, India y Rusia, cada uno a su manera, es la gran batalla que se avecina.

Publicado en La Vanguardia el 16 de noviembre de 2022

  8 comentarios por “La gran batalla que viene

  1. Poner el planeta a dieta una temporada yo creo que estaria bien.
    Y por cierto el misil aterrizado en Polonia (pobre Polonia!) era ucraniano.
    Rusia aislada? Por favor Sr. Foix dele un vistazo al mapamundi!
    Zelenski que se siente a negociar y luego que vuelva a los monologos que es lo suyo y la UE que no siga foten el pena.
    Y los de Bali que no fotin mes el paiaso!

  2. No nos engañemos y volvamos a poner los pies en el suelo como hace muchas veces Foix. ¿A quien beneficia esta guerra? A los grupos energéticos y grandes productores i comerciales de gramíneas. Europa, Japón y China quedan al margen y ven perjudicados sus negocios. Otros países al limite de la supervivencia.
    Con seis meses de desestabilización de los mercados mundiales ha sido suficiente para que restablecer sus antiguas ganancias. Mas tiempo de guerra seria tanto como romper las huchas. La velocidad de intercambio alcanza la velocidad de la luz y la cantidad de la moneda es irrelevante. No hace falta tener la máquina para imprimir billetes ni la gran cantidad de dolares que tenia Xina para lo que hiciera falta. Lo fundamental como en los tiempos primitivos es el intercambio en especie, en productos. La guerra debe terminar y los actores volver a su lugar, el escenario acotado.

  3. Lluís Foix, gran periodista con una visión global de la política mundial, a los acontecimientos en los pequeños países y regiones, a lo que ocurre en un club de fútbol como el Barca, hasta la descripción humana del día a día en una casa rural y el idílico transcurrir silencioso de las estaciones que se reflejan en en el campo y la ciudad. Luis, un pensador, un escritor y un poeta. Pocos personajes así nos da nuestra tierra, demasiado convulsa por pequeñeces.

  4. Buenas tardes,

    Sí, es la eterna lucha para dirimir quién controla el mundo. Pienso que es un error conceptual. Estamos en los inicios de una nueva etapa tecnológica de la humanidad, pero mantenemos viejas ideas que son una trampa. Todos los imperios que han existido han desaparecido, han dejado una cierta huella tanto positiva como negativa, e incluso criminal. Sería hora de no volver a repetir esos ciclos que han sido siempre violentos. Es la hora de fortalecer un gobierno mundial y de comprender que las naciones y los estados antiguos y actuales son solo narraciones sin ningún valor científico, más explicables por la biología y la conducta de los mamíferos que por la de una supuesta especie inteligente.

    Saludos,

  5. Estoy totalmente de acuerdo en todo lo que nos relata en su artículo de hoy, titulado : » La gran batalla que viene » ( Lluis Foix )

    Pero tambien, me hace pensar en que , la humanidad está aumentando por los nacimientos constantes y está a punto de alcanzar ya, los 8.000.000. millones de seres humanos.

    Ahora nos viene también ese problema vital y sus consecuencias explosivas, imprevistas, ect.

    No comment. Pero tambien es ó será una realidad.

    • Corrección de error al teclear,… he escrito 8.000.000 millones de seres humanos y quéría y debe de decir correctamente : …. 8.000.000.000 millones de seres humanos.

Comentarios cerrados.