
Ganar tres Clásicos en un año no se había visto desde que Pep Guardiola lo consiguió contra el Madrid del problemático Mourinho el 2011. Fue en aquel año en el que el actual entrenador del Roma le metió el dedo en el ojo al malogrado Tito Vilanova, ayudante de Pep a la sazón, con un enigmático…