
Ganar jugando bien es el sueño de cualquier entrenador. Da la impresión de que Hansi Flick es inmune a las adversidades. Se acomoda a la baja temporal de Lamine Yamal, se muestra impertérrito por tener el apoyo de menos de 6.000 aficionados en el estadio miniatura Johan Cruyff, resiste los rayos y truenos de una…






